El Tao que puede ser expresado
no es el tao eterno.
El Nombre que puede ser pronunciado,
no es el Nombre Eterno.
El principio del cielo y tierra se hallan en el “No Ser”.
El “Ser” es la madre de lo único.
Por eso la dirección al “No Ser”,
lleva a la contemplación de la maravillosa esencia.
La dirección del “Ser”,
lleva a la contemplación del mundo de las formas.
Ambos son idénticos en el origen,
y solo se diferencian en el nombre.
En su unidad son un misterio,
y son la puerta de la que surgen todos los milagros.
Lao Tse, Tao Te King verso I
Reiki es un término japonés utilizado por Mikao Usui Sensei para denominar a la energía espiritual universal.
El sendero del Reiki es, para el caminante, un camino de auto-conocimiento y crecimiento personal, de purificación, auto-sanación y sintonización con las altas frecuencias de amor y comprensión que permiten sanar a otros.
Os invito a adentrarnos en el camino del Reiki dejándonos guiar por el Kanji, pictograma japonés, más ancestral del término Reiki, cuyo significado en los tiempos de Mikao Usui era energía espiritual.
Se dice que una imagen vale más que mil palabras: en Japón la caligrafía es un arte (Sho-do) en la que escritura y pintura son unidas en un todo marcado por el valor estético de la belleza y sus sutiles resonancias. Es un arte que nos invita a redescubrir el gusto por la apreciación del fluir de la pincelada que, cuanto más vacía más bella, en plena sintonía con la Naturaleza y con el Tao.
El término Reiki consta de dos Kanji que fueron introducidos desde China a través de Corea hasta Japón. En la tradición sintoísta se relacionan los Kanji con las aves como mensajeros de dioses. Los Kanji pueden representar una idea, un concepto, un objeto o un sonido.
En su libro Esto es Reiki, Frank Arjava Petter nos ofrece una interpretación de los pictogramas más primitivos de los términos Rei y ki:
El primer pictograma Rei se divide en tres partes:
- Ame que hace referencia a la lluvia que cae en la tierra como una bendición y es símbolo de fertilidad.
- Utsuwa que significa recipiente y que aquí se puede interpretar como recipiente del alma. Las tres casillas que caracterizan el signo, dice F. Arvaja Petter, pueden interpretarse también como boca, palabra/comunicación y oración.
- Miko que significa médium femenino, bruja o chamán. Antiguamente, Miko era una mujer capaz de comunicar con los dioses, era el médium entre cielo y tierra, vida y muerte, Dios y humanidad.
En el conjunto, el pictograma parece significar Alma.
El signo Ki también se divide en dos partes:
- Kigagamae o yuge que significa vapor, éter o vacío.
- Eje-cruz en expansión que significa Arroz. El arroz es la principal fuente de alimento en Japón y en China.
En el conjunto, el pictograma significa Energía y vapor de arroz.
En el Japón actual, el término Ki presenta centenares de palabras combinadas. Entre los significados encontramos: alma, corazón, intención, sentimiento, temperamento o atmósfera…
El Ki es entendido como energía vital, fuerza interior. Es un concepto fundamental en la Medicina China, en las Artes marciales y en las Artes Internas de la Salud.
Walter Lübeck explica que el pictograma Ki: vapor y arroz expresa la cualidad nutriente del Ki para el cuerpo, el espíritu y el alma. (1)
Podemos entonces observar que el movimiento circular entre materia y espíritu, cielo y tierra, Yin y Yang, ya es presente en el signo mismo KI desde un tiempo inmemorial: el agua que evapora desde la tierra y se eleva hacia el cielo, se convierte en nubes que a su vez se transforman en lluvia volviendo a la tierra y sus entrañas en forma de agua. Y aquí aparece la imagen de los arrozales cubiertos de agua, cuyo fruto, el arroz, es el gran alimento y símbolo de bendición en China.
Los antiguos, celebraban la fertilidad a través de rituales que expresaban un agradecimiento profundo hacia la Naturaleza. De aquí posiblemente la relación del significado del signo con la oración y con los rituales mágicos chamánicos.
(…) existe la experiencia de que partes del alma, como el vapor del agua, que es liberado por el calor del sol de las cadenas de sus adherencias materiales, se eleven desde el suelo hacia las extensiones luminosas del Cielo, camino a su origen para recibir allí consejo, refrescarse en la fuente de vida y, tras ser fortalecidas, actuar conforme a la fuerza creadora para configurar y regenerar la vida en el orden material del sentido divino. (2)
Si el alimento que nutre el cuerpo es cultivado por el ser humano de forma respetuosa hacia la naturaleza de la que proviene y de la que somos parte y es cuidado y apreciado, entonces se convierte también en sustento para el espíritu y comida para el alma. Esta es la ecología profunda que nos conecta con la eterna dimensión del Bien.
La voracidad de la mente humana con sus deseos de arrogante densidad que limita su experiencia en la tierra a un juego de supremacía y poder sobre cualquier cosa que encuentra en su camino, está lejos de estos entendimientos, aunque podemos constatar que el estado de consciencia parece estar evolucionando poco a poco y hay más y más personas que descubren los beneficios de una relación armoniosa y saludable con el entorno y con su propio interior. Respetar la Vida en todas sus manifestaciones. Respetar a todos los seres con los que compartimos nuestra experiencia en la tierra es la condición necesaria para la felicidad.
Podríamos entonces leer en el signo Reiki como la energía purificadora, una lluvia luminosa que es recibida por el ser humano como un regalo de Vida. El agradecimiento se realiza por medio de un trabajo de transformación del cuerpo-mente como lugar sagrado. Materia y espíritu aquí se unen. El ser humano, guiado por la luz divina, puede entrar en su interior y conocerse a Si mismo y en función de este conocimiento, actuar con sabiduría.
El grano de arroz entonces podría representar la semilla cuyo cultivo genera alimento para el alma.
Notas
- Walter Lübeck, Frank Arjava Setter, William Lee Rand, El Espíritu de REIKI, pág. 43.
- Walter Lübeck, Frank Arjava Setter, William Lee Rand, El Espíritu de REIKI, pág. 45.

